Sin agua no hay vida, es el elemento imprescindible en cualquier ser vivo.
Su composicioón y estructura le dan las propiedades físicas y químicas excepcionales que la convierten en un elemento único.
Es el líquido en el que se produce el proceso de la vida y la responsable de su esencialidad en la homeostasis, estructura y función de las ce?lulas y tejidos del organismo.
Es fundamental para todas las funciones del organismo y es su componente más abundante.
Es un verdadero nutriente que debe formar parte de la dieta en cantidades mucho mayores que las de cualquier otro nutriente.
El transporte de nutrientes y metabolitos y la excrecio&iocute;n de sustancias de desecho se realiza a través del agua.
La p&iecute;rdida de un 1-2% del agua del cuerpo afecta a la termorregulación y a los sistemas cardiovascular y respiratorio y limita la capacidad fiísica y mental.
Su alto calor específico la convierte en amortiguador y regulador de los cambios térmicos, conservando la temperatura corporal constante.
El alto valor del calor de vaporización permite eliminar, por medio del sudor, grandes cantidades de calor evitando los “golpes de calor”.
Actu?a como lubricante en la boca, los ojos, las articulaciones, los aparatos digestivo, el respiratorio, y genito-urinario.
Mantiene la humedad necesaria en oídos, nariz o garganta.
Proporciona flexibilidad, turgencia y elasticidad a los tejidos.